El vicepresidente segundo de la Junta de Asturias deja el PP para seguir a Cascos
El vicepresidente segundo de la Junta General del Principado, Pelayo Roces, ha anunciado que este mismo lunes formalizará su renuncia como diputado del PP en el Parlamento regional.
La renuncia de Roces tendrá lugar en el Registro de la Junta General del Principado a las 12:30 horas, un día después de que el ex ministro Francisco Álvarez-Cascos anunciara que está dispuesto a liderar un nuevo partido tras su frustrada designación como candidato del PP en Asturias, que le ha llevado a darse de baja como militante.
Por su parte, el concejal del PP en Gijón Pablo González ha asegurado que será "coherente" con su postura anterior y actual de apoyo al ex ministro. "Me pongo a su disposición para empujar en ese proyecto de cambio y de regeneración económica, social y política de Asturias", ha asegurado al diario 'El Comercio' sin llegar a adelantar si se dará de baja del partido.
'A la dirección del PP Asturias le importa un comino'
En una multitudinaria rueda de prensa celebrada en Oviedo el domingo, el ex 'número dos' en la etapa de José María Aznar no aclaró si se presentará a las elecciones autonómicas del próximo 22 de mayo, pero por sus palabras se dedujo que sí lo hará: "La aventura ya no depende de mí, será cosa del conjunto de los ciudadanos. Vale la pena el esfuerzo para recuperar el orgullo de ser asturiano".
Cascos afirmó que el PP "ha hecho oídos sordos a la voz de más de 7.000 afiliados, a alcaldes, concejales, diputados regionales y docenas de cargos", que apoyaban la candidatura del ex vicepresidente del Gobierno a la presidencia del Principado.
En su lugar, el Comité Electoral Nacional del PP acordó el pasado jueves proclamar a Isabel Pérez-Espinosa como su candidata para las elecciones autonómicas, pese a que, según Cascos, el propio Rajoy le comunicó el pasado 17 de septiembre que creía que él debía ser el candidato.
"Ha quedado meridianamente claro que a la dirección del PP Asturias le importa un comino. Lo menos es lo sucedido con mi indefensión como militante. Lo más grave es el menosprecio mostrado hacia muchísimos militantes. Han importado mucho menos que otros intereses particulares de la dirección del PP y principalmente de su presidente nacional", sentenció Cascos.
